Hacía tiempo que no volvía a coger la bici (desde antes de las navidades, creo) y lo echaba de menos, por eso esta mañana he decidido volver a montar. Sin embargo, me apetecía cambiar, así que opté por hacer bici de montaña. Y al Pardo que me fui. El monte del Pardo está guay para montar en bici. Además, hoy no hace mucho frío, así que ha sido bastante llevadero.
Montar en bici siempre está bien, y por el campo mola más. Pero tiene un problema: cansa mucho, mucho más. Claro, no es comparable un carril bici con el monte, en el que todo son curvas por mini-caminos que no son más que pasos por los que han pasado bicis antes, entre matorrales, espinos y cosas de esas. Pero está bien porque es la naturaleza y la naturaleza es buena. (Siendo sincero, no he estado "disfrutando" de la naturaleza, sólo me interesaba el hecho de montar en bici. La próxima vez intentaré hacerlo). Han sido unas dos horas de bici, con alguna parada de no más de treinta segundos para beber agua o para colocar la cadena (que se me ha salido varias veces).
En fin, que ha estado bien, que lo echaba de menos y que sienta muy bien retomar el hábito. Espero volver a montar en bici el finde que viene y así volver a la rutina.
Os dejo una foto de Madrid que he hecho desde a tomar por culo las afueras y el mapa de Runkeeper en el que sale el recorrido que he hecho.
¡Un saludo!
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