25 noviembre 2015

Porque no puedo estudiar, escribo

Fui una luz un día, y volé por los cielos y era de noche y las sombras querían acabar conmigo pero yo era luz luz luz. Era un gato muerto/vivo/no-sabe-no-contesta debajo de una caja. 

Fui silencio en un concierto de rock, el cable que llevaba la magia de las cuerdas desde la guitarra hasta el ampli. Era una niña que se caía al suelo, miraba a su alrededor, y sólo lloraba si había alguien. 

Fui el hospital donde me ingresaron cuando un coche quiso pasar por encima de mí por mi culpa, aunque solo tenía seis o siete años y faltaba poco para las navidades. Era el olor a bizcocho cada vez que mi madre decide hacerlo de merienda.

Fui, tantas veces, una estrella que se apagaba a años luz de tus ojos, que no se daban cuenta porque estaban tan lejos que las distancias ya no tenían unidad de medida, sino de tiempo. Era un "sí, quiero" en la boda de una película sin presupuesto. Todos los días.

Fui la cama donde dormía borracho un saco de huesos, vacío, escondiéndose de drogas y miserias por una vez. (Fuera llovía, era lunes y qué más daba todo.) Era un misterio tan fácil de descubrir que daba pena. (También daba limosna, de vez en cuando, para que el yonki pudiera volver a drogarse.)

Fui un semáforo y evité un accidente. Era una enfermera que cuida de una niña recién nacida, huérfana.

Fui fuego en la hoguera. Era las olas del mar, balanceándose y bailando al son de la brisa de verano en la noche de San Juan.

No tengo ni idea de quién fui ni de quién era, pero de lo que estoy seguro es de que hoy en día soy


y no es contigo.


16 noviembre 2015

Más cosas para continuar noviembre

Han pasado dos semanas desde que escribí por última vez en el blog y parecía que noviembre iba a ser un buen mes. O, por lo menos, no esperaba estar hablando dos semanas después de dolor, terrorismo, guerra, sangre.

París llora. También lloran Siria, Palestina, Kenia, Irak. Llora Europa, lloran las dos Américas, llora Asia en todas partes, llora África. Lloran las personas, lloramos todos. Yo-ro. Yo lloro de dolor e impotencia ante la maldad inexplicable de alguna gente. Gente que incita a otra gente a matar a gente. Matar. Ma-tar.

El mundo está patas arriba, y nos damos cuenta ahora porque nos toca cerca. Pero ya estaba así antes. Aunque las noticias no llegan, o llegan con tan poca fuerza que se disipan con facilidad. Tenemos los corazones acostumbrados a las masacres, están podridos de tanto dolor que nos tragamos cada vez que encendemos las noticias. Qué vamos a hacer. Qué. Vamos. A. Hacer.

Noviembre empezó a tope. Puedo volver a seguir viviendo mi vida como si nada.

Si hiciera eso, os animaría a participar en el crowdfunding de Saco la basura por escrito, de Sara Megías. Es su primer poemario y, de corazón os lo digo, promete. Que a Sara ya le he escuchado recitar varias veces y sé de lo que hablo. La poesía necesita vuestra ayuda, y ayudar es tan fácil como clicar aquí y aportar algo.



También os diría que este viernes viene a Madrid María Part para presentarnos su libro Castigo divino el de matarnos los domingos, publicado por Ediciones En Huída. Será en Aleatorio, a las ocho de la tarde, y colaborarán Davile Matellán, AlbertoEsFeliz y Kris Diminutayazul. Viernes 20. Aleatorio (C/ Ruiz, 7). Aquí tenéis el evento en Facebook.


Si no estuviera pensando en lo triste que me pone la violencia, os contaría que este finde vi la peli Casi famosos y que me pareció una chulada. Va sobre un chaval de quince años apasionado de la música que quiere ser periodista musical. Y que consigue un artículo para la Rolling Stone, se va de gira con una banda de rock y conoce a una chica preciosa. Entended que, como pseudoperiodista musical, la peli me ha encantado. Me he sentido identificado con el chaval.

Queda medio noviembre. Por favor, pórtate bien. No nos des más sustos.

02 noviembre 2015

Cosas varias para empezar noviembre

Noche de lunes, después de un tiempo sin escribir así, contándoos mi vida en el blog. 

Lo primero que voy a contaros es que estamos en noviembre y que tenía pensado participar en Nanowrimo este año, pero que al final he decidido que lo haré en enero, pues este año tengo los exámenes del primer cuatrimestre en diciembre y estoy a tope con el último año de la carrera. Prefiero dejar lo de escribir para enero, que estaré más libre.

Otra cosa que os cuento: mientras escribo esto estoy escuchando Dimensions of Dialogue, de Lucía Scansetti. El disco sale el viernes, día 6, pero los que hemos participado en el crowdfunding podemos disfrutarlo desde esta mañana. Y es una preciosidad, os lo recomiendo muy mucho. El jueves 5 presenta el disco en directo en la Honky Tonk de Madrid a las 21:30.

Así, cosas varias que me van viniendo a la cabeza: este Halloween no salí, pero me quedé en casa viendo Pesadilla antes de Navidad y es que cada vez que veo esa obra de arte me gusta más. Es una pasada de película, como todo lo de Tim Burton.

Por otro lado, sigo practicando algo de magia. Por eso la foto que acompaña a estas palabras. Y estoy en Snapchat como quikedb, por si queréis seguirme y eso.

Otra cosa que me viene a la cabeza ahora: los viernes por la noche podéis escucharme recomendando música indie en La Habitación 213, un programa de radio online de @Kilfer. De momento he hablado de Lara Morello, Virginia Maestro, Davile Matellán, Dr. Sapo, Gonzalo Alcina y Oscar Hoyos. ¿Me recomendáis algo para este viernes? Ahí tenéis la caja de comentarios para recomendar algo.

Y os dejo aquí un corto que os gustará a los seguidores de Star Wars y que me han enseñado esta mañana en la uni, que me parece genial.



El otro día escribí un poema nuevo aquí, en el blog. Por si no lo has visto y ya que estás aquí, échale un vistazo.

Y así, después de este post caótico os deseo un buen mes de noviembre antes de despedirme. Ya se acaba el 2015, joder. Qué rápido.

¡Hasta otra!